Su color y su forma llaman la atención de más de un
consumidor al momento de llegar a la verdulería y/o mercado. Sin embargo,
debiera ser otro el motivo de nuestro interés. Los espárragos tienen un rico
potencial de nutrientes que se traduce en múltiples beneficios para nuestro
organismo. Conoce más de este verde vegetal en esta nota.
Como señalábamos, el esparrago es un alimento muy
conocido y popular. Una de las principales razones, es su excelente sabor y
facilidad de preparación. Sin embargo, eso no es todo lo que nos pueden ofrecer
los espárragos, ya que desde el tiempo de los egipcios, se conocían importantes
propiedades de este vegetal en la salud. De partida, los espárragos son bajos
en calorías y en sodio, lo que resulta ideal para personas que sufren de
hipertensión.
Además el espárrago es una excelente fuente de agua
y fibra, por lo que es recomendable su consumo para personas que necesitan
adelgazar o mantener un peso adecuado, otra gran ventaja para gente hipertensa
o con evidente sobrepeso. Los espárragos tienen también una gran cantidad de
vitaminas, donde destacamos una buena proporción de vitamina B6. El esparrago
también es una excelente fuente de calcio, magnesio, zinc, vitamina A, C, y E.
También tenemos la vitamina K, tiamina, riboflavina, ácido fólico, hierro,
fósforo, potasio, cobre, manganeso y selenio.
Todo esto mejora el estado general de la salud,
fortaleciendo el sistema inmunológico y el sistema nervioso. También es
indicado para purificar la sangre y aclarar la mente, debido a la presencia del
complejo vitamínico B. Si quieres mejorar el aspecto de tu piel, unas y pelo,
no deberías dejar de comer espárragos, ya que además los espárragos son un gran
antioxidante.
Ya
habíamos mencionado que los espárragos contienen también vitamina C, que no
debemos olvidar, ayuda al cuerpo a mantener y producir colágeno, que es la
proteína principal de los tejidos del cuerpo. El esparrago inclusive puede ser
utilizado para aliviar cálculos en los riñones.
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